Lucca y Pisa

Hoy terminamos nuestra visita en Italia con Lucca y Pisa. La primera es algo menos conocida que la segunda. Es un pueblo pequeñito metido en una muralla, dentro de la cual tenemos todo lo típico que pueda tener un pueblo o ciudad: iglesia, catedral o Duomo, plaza..) Por esta zona los Duomos, (o catedrales para nosotros) son algo distintos a los que vimos por la zona de Florencia. Aunque también tienen los 3 colores característicos del mármol (rojo, verde y blanco) vemos que tanto en Lucca como en Pisa en la parte de arriba tienen unas columnas pequeñas que las hacen diferentes. En Lucca es muy típico alquilar una bici para recorrer la zona de dentro ya que es todo peatonal y tienen un carril bici que recorre toda la muralla y se puede ir viendo el pueblo.
Y para terminar hablaré de Pisa, que también es una ciudad amurallada y que como todo el mundo sabe tiene 3 monumentos que se encuentran en la misma zona: El Duomo, El Baptisterio y la Torre Inclinada. El recinto en el que se encuentra ubicado es una pasada, todo ajardinado y hemos podido ver como la gente se hace la típica foto sujetando la torre Inclinada de las formas más disparatadas y ocurrentes.

Tengo que decir que hoy me voy con buen sabor de boca de Italia, creí que no iba a probar una pasta hecha en condiciones y hoy he comprobado, en Pisa, que hacen la mejor pasta que haya podido comer en todo el país. Unos espaguetis carbonara como dios manda en una trattoria y a un buen precio. Menos mal porque empezaba a pensar que en España se hacía mejor pasta que en el propio país que tiene la fama.